La final entre la Peña Bolística Piloñesa y la Peña Bolística Villa de Noreña sirvió para inaugurar la instalación municipal, ubicada en San Cipriano
Con la final del campeonato de Asturias de segunda categoría entre la Peña Bolística Piloñesa y la Peña Bolística Villa de Noreña quedó inaugurada este sábado la nueva bolera municipal de Piloña. Ubicada en el recinto del antiguo instituto de San Cipriano, la instalación deportiva forma parte del proyecto de rehabilitación y nuevos usos que el Ayuntamiento ejecuta en ese espacio.
«Estamos muy contentos, esta es una de las instalaciones que teníamos previsto construir. Vamos cumpliendo los objetivos», valoró el alcalde de Piloña, Iván Allende. Recordó además que al llegar el equipo local a la final -en la que la victoria fue para los de Noreña por 14 a 10- ascienden a primera categoría. De ese modo «la próxima temporada vamos a poder disfrutar de esta bolera y de nuestra peña en primera categoría asturiana, lo que para ellos es un éxito y para nosotros un orgullo», señaló.
Además de campeonatos oficiales, la nueva bolera se aprovechará para formar cantera. Este mismo verano está programado un curso gratuito para menores de 9 a 18 años que impartirá la propia Peña Bolística Piloñesa. En la memoria de muchos piloñeses está presente la labor de atraer a los más jóvenes que durante años desarrolló el añorado Manolo Marina, entusiasta de ese deporte tradicional asturiano.
La recién inaugurada bolera se suma a las instalaciones ya rehabilitadas en San Cipriano, como el rocódromo creado en el antiguo gimnasio. También están ya operativas en la planta baja del edificio principal las dependencias que ocupará el Espacio Joven, estrenadas la pasada semana.
El objetivo del Ayuntamiento es hacer de San Cipriano un centro de desarrollo cultural, social, deportivo y de emprendimiento. Desde que cerrase sus puertas en 2010 ese antiguo instituto de bachillerato y FP había sufrido un progresivo deterioro y múltiples actos de vandalismo.
Hace dos años, el Consistorio consiguió fondos europeos por valor de 1,5 millones para la rehabilitación de una de las alas del inmueble principal. Para acondicionar el resto de zonas han recurrido a «fondos de otras administraciones» y talleres de empleo, pues según recordó el alcalde el objetivo es «ir mejorando sin comprometer la economía del Ayuntamiento».
