Un animadísimo desfile de carnaval, formado por casi un millar de integrantes, recorrió las calles de Posada de Llanes repartiendo alegría y son de fiesta
Tiempo de lectura: 2 minutos
La energía de un eclipse de sol, el aire de primavera y la buena fama que tiene el carnaval de Posada de Llanes formaron un combo perfecto para que el pasado sábado, a las seis de la tarde, las calles del lugar fueran todo un hervidero de personas: muchos buscaban hueco para disfrutar del colorido espectáculo que estaba a punto de comenzar y otros muchos, casi mil personas, buscaban sitio en el animado desfile que se preparaba para empezar, dando vida a uno de las comparsas carnavalescas más numerosas de todo el oriente asturiano. A la cabeza y al cierre, iban las reinas del carnaval de Posada de Llanes, una tradición que este año cumple un cuarto de siglo.
El de Posada es casi ya el último carnaval de la zona oriental de Asturias y tuvo muchísima afluencia. Hasta la localidad llanisca se desplazaron participantes de todo el concejo y de todo Asturias pero también de la vecina Cantabria e incluso de Pamplona. No en vano, al ser uno de los últimos aglutina muchísimos grupos con ganas de lucirse y bailar antes de cerrar la temporada carnavalesca. Y, además, los 7000 euros en premios que se repartieron animaban mucho más. Total, que todo estaba bien dispuesto para que las calles de Posada vibraran el buen rollo, la alegría, la música, la luz y el color. Como tiene que ser un carnaval: toda una fiesta.

























































