Mientras duren los trabajos, previsiblemente durante semanas, el tráfico será desviado por la N-630, la carretera de Pajares
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Un argayu de enormes dimensiones corta desde la mañana de este domingo los cuatro carriles de la autopista del Huerta, conexión por carretera entre Asturias y León. Por el momento no existe constancia de que el desprendimiento haya atrapado ningún vehículo, si bien las tareas para descartar por completo esa posibilidad continúan.
Desde la Delegación del Gobierno en Asturias lanzaban un mensaje tranquilizador: «La concesionaria de la autopista ha comprobado con sus cámaras de seguridad que todos los vehículos que circulaban por ese punto fueron detectados por más cámaras de seguridad tras el desprendimiento».
La delegada del Gobierno, Adriana Lastra, ha explicado que «una vez se descarte por completo que no hay vehículos sepultados, Aucalsa examinará el estado de la ladera antes de comenzar con las labores de desescombro». Mientras duren los trabajos, previsiblemente durante semanas, el tráfico será desviado por la N-630, la carretera de Pajares.
Fue en torno a las 10.15 horas cuando la Guardia Civil recibió el aviso del «derrumbe en la ladera» de la AP-66, a la altura del punto kilométrico 76, a unos 14 kilómetros de la localidad de Pola de Lena (Asturias). El argayu cortó por completo ambos carriles.
Al lugar del incidente se desplazaron efectivos de la Guardia Civil de Tráfico, quienes se encargaron de regular el desvío del tráfico en la Magdalena y Lea para circular por la N-630. También acudieron efectivos de varias patrullas de seguridad ciudadana de la Guardia Civil de zonas cercanas, así como del Greim de Mieres con un perro de búsqueda de personas desaparecidas en grandes áreas.
A las 12.30 horas concluyeron las labores de evacuación de los vehículos bloqueados, con un balance de afectados por el corte de vía sentido León (parte asturiana) de 145 turismos, 14 camiones y dos autobuses (con pasajeros), indicaron desde el instituto armado.
